Traducciones:
Otras páginas:
Módulos de Adiestramiento
Mapa del Sitio de Akan
Sociología para principiantes
Contacto
Kompan Adepa
Ve a la gente
Ghana Web
Hombres y Mujeres; (3) Abe, Palma de aceite
Recolección
por Phil Bartle, PhD
traducción de Mª Lourdes Sada
La palma de aceite (abe) tiene treinta usos (es decir, muchísimos). No se puede hacer un tabú de la palma de aceite: siempre acabarás tocándola.
─Proverbio akan─
- Hombres y Mujeres; (1) Palma de aceite; Introducción y Conclusión
- Hombres y Mujeres; (2) Palma de aceite; Cultivo, Aceite
- Hombres y Mujeres; (3) Palma de aceite; Recolección
- Hombres y Mujeres; (4) Palma de aceite; Comercialización del vino
- Hombres y Mujeres; (5) Palma de aceite; Otros productos
Recolección
Cuando el hombre compra la palma a la granjera que la cultivó, lo primero que hace es derribarla, cavando bajo la raíz principal.
 |
 |
Una palma abatida, lista para su corte.
El recolector visita sus palmas cada mañana.
 |
 |
 |
Yao Koko, Kwantenang
Preparación de un haz de ramas de palma para quemar.
El recolector sale a las seis todas las mañanas, pertrechado de un machete, un recipiente y un haz de ramas secas de palma.
Cada mañana, antes de amanecer, el recolector de vino de palma se dirige a su hilera de palmas. Como este, lleva un afilado cuchillo o machete, un gran recipiente para recoger la savia y un fajo de ramas secas de palma, con las que hará una hoguera que utilizará en el proceso.
 |
El estudiante de doctorado Phil Bartle con un recolector de savia.
En la foto, el autor de este documento con un amigo recolector de vino de palma. En los sesenta y setenta, el pelo largo y las gafas redondas eran muy populares.
La palma se derriba cavando alrededor de sus raíces, y mientras yace sobre un costado, el recolector acude todas las mañanas.
Todos los recolectores a los que he preguntado dicen que un árbol proporciona savia para hacer vino durante unas seis semanas. Me intriga bastante la mención de seis semanas, pues significa adaduanan, los cuarenta días del calendario tradicional, y sospecho que se usa un poco como nosotros utilizamos la palabra «mes» para estimar un periodo de tiempo, incluso si no es exacto.
 |
Agricultor retirando la corteza
Los recolectores de Ghana miran por encima del hombro a los de Nigeria, que extraen la savia mientras el árbol todavía está en pie. Los de Ghana piensan que los nigerianos son mezquinos, pues intentan conseguir más savia de cada árbol, sacrificando el mejor sabor que tiene la del árbol abatido.
 |
Trasvase de la savia del pequeño pote bajo el árbol al gran recipiente de recolección.
La primera tarea en cada árbol es recoger la savia que se ha reunido dentro del árbol y ha goteado en un pequeño tarro durante el día y la noche anteriores. Después devolverá el pequeño bote a su lugar bajo el árbol, y marchará con el grande tras recoger la savia de todos los árboles de su fila.
Aquí puede verse el gran agujero en la parte alta de la palma abatida, donde el recolector ha colocado su haz de ramas secas ardiendo. La paja que lleva en la boca es lo que utilizará para avivar el fuego, de la misma forma que un herrero sopla en el carbón para atizar el fuego de su fragua.
 |
 |
Prueba del sabor
 |
Kwantenang
Un recolector aviva una hoguera de ramas de palma con un fuelle.
Después de retirar la savia, el recolector enciende su haz de ramas secas dentro del gran agujero de la parte alta de la palma abatida. El recolector puede utilizar un fuelle (igual que el de un herrero) como en la foto de arriba, o su paja, como abajo. Así se escalda el fondo y los lados del agujero, para que la savia que está apareciendo dentro de él no se escape por los poros del tronco. Se deslizará hacia un agujero más pequeño en la base del tronco, y por él, al pequeño recipiente que se colocará para recoger la savia durante las siguientes 24 horas.
 |
 |
Un recolector atiza una hoguera de ramas de palma soplando por una paja.
Después de cauterizar el fondo y los cuatro lados del agujero de recogida, el recolector debe retirar la superficie quemada del lado que queda más alto, para permitir que la savia mane hacia el agujero.
 |
 |
 |
Corte de la primera capa de fibras escaldadas en el lado más alto del agujero de recolección
Esta es una vista del agujero que hay en la parte más alta del tronco caído. Después de escaldar el fondo y los lados del agujero, el recolector debe retirar una fina capa del lado que está más alto, para que la savia que todavía queda en el tronco mane hacia el agujero. Varias veces a lo largo de las seis semanas, el recolector elevará la parte superior o inferior del tronco ligeramente, para que la savia se deslice hacia el agujero desde ambos extremos por turnos. En la foto, a la derecha del agujero, colgando a un lado del tronco, puede verse la corteza o parte exterior del tronco. Se repliega sobre el agujero para evitar que entren la lluvia, pequeños animales o insectos durante las siguientes 24 horas.
La savia es una interesante sustancia química. Hasta ahora no se ha descubierto un tratamiento que detenga su proceso de fermentación. Colocar la savia en botellas selladas sólo produce explosiones cuando la presión aumenta dentro de los recipientes.
La savia es muy dulce y contiene poco alcohol la mañana en que se saca del árbol por primera vez. Es popular de esa forma, pues cuando tomamos un poco de sal gorda y quizá unas guindillas, podemos beber una gran calabaza de savia sin fermentar. Después continúa fermentando durante todo el día, pasa por el sistema digestivo y va directamente a la corriente sanguínea, proporcionando una estable fuente de energía, que elimina la necesidad de comer durante ese día. Tanto hombres como mujeres beben vino de palma, pero es muy popular entre los hombres que se enfrentan a duros días de tala de terrenos para su cultivo.
Ya han visto la calabaza que se usa para beber vino de palma. Está hecha con la fruta del árbol de la calabaza (Crescentia).
 |
La fruta de este árbol no se come
Cuando la fruta está en el árbol, es muy tierna y se corta fácilmente. Se saca la pulpa del interior y se tira. Se hacen boles cortándola por la mitad, o una botella practicando un agujero en uno de los extremos y vaciándola por él.
El abe tiene treinta usos (incontables, muchos).